Por Néstor Murray-Irizarry, historiador y gestor cultural

Elsie Ortiz CardonaElsie Ortiz Cardona

Nació en Covadonga, Bayamón, Puerto Rico. Hija del matrimonio de Joaquín Ortiz y Victoria Carmona. Su padre trabajaba con el gobierno y su madre era ama de casa. La familia emigró a  Manhattan, Nueva York cuando Elsie tenía 16 años de edad. Elsie consiguió un empleo en  un Day Care como asistente de maestra. También estudió en  New York University para ser maestra, pero no lo terminó y se fue a trabajar a la School Safety en el New York City Department of Child Agency. Se casó con Juan Cruz en Manhattan a los 23 años.

En 1978 cambio de trabajo buscando mejoras salariales y la manera de ayudar a los jóvenes. Leyendo el periódico, encontré que se necesitaban personas para trabajar en el departamento de Educación. Me contrataron y me asignaron a trabajar en una escuela superior de dos mil estudiantes. Después de los tres meses de trabajar, ingresé al sindicato Teamsters 237. Había un líder de la Unión Mr. Harding que me orientó. El ambiente de la escuela era muy bueno. Me levantaba a las 5:00 am porque entraba a las 7:30 am, tomaba mi desayuno y preparaba mi almuerzo y mi esposo me llevaba al trabajo. A los seis años de estar trabajando allí cerraron la escuela.

Luego me trasladaron a otra escuela y gracias a la Unión me aumentaron el sueldo a 12 dólares. Organizaba el itinerario junto al principal de la escuela quien me informaba acerca de las actividades del día. Comencé con el puesto de Sargento, después de los tres meses ellos me hicieron una entrevista, me dieron un examen y me dieron el puesto. Tenía 8 guardias a mi cargo. Era una escuela cuya matrícula estaba compuesta principalmente de chinos y de latinos. En un momento de mi vida profesional tuve 4 escuelas adicionales y 11 guardias. Yo hacía una reunión todos los días y se hacía un itinerario semanal y un plan diario para cada uno de los guardias. Cuando había una pelea entre estudiantes nos visitaba un funcionario de la Unión y ofrecía ideas para solucionar el problema. Trabajo en esas escuelas durante 20 años de donde me jubile en 2006. A las 4:00am me tenía que levantar a esa hora porque el trabajo me quedaba más lejos de mi casa y tenía que llegar a las 6:30 para organizar a mi gente, iba a hablar con el principal para informarme de lo que se haría ese día y a su vez poder informar a los guardias. Luego iba a hacer lo mismo a cada una de las otras escuelas. Esto lo terminaba a las 10:00 am. Luego llamaba a la oficina principal he informaba de la asistencia de los guardias de las cuatro escuelas después revisaba el puesto de cada uno de los guardias y resolvía en caso de que uno de ellos hubiera faltado o si se enfermaba. Salía a las 3:00 pm, pero a veces tenía trabajo extra.

Me retiré en 2006 y me involucré en algunas de las actividades que organiza la Unión. Yo pertenezco al Comité Latino. Para mí, ser miembro de un sindicato, es muy importante. Soy muy feliz porque gracias al liderato de la unión, a su inteligencia y a su sabiduría, dedican mucho tiempo para buscar mejores beneficios para nosotros los jubilados. Puedo tener mejores beneficios, en el caso de yo tener algún problema, me pueden asesorar. Con lo que yo he aprendido de la Unión puedo ayudar a otras personas, les puedo dar orientación, a dónde ir, qué preguntar, etc.



Olga María Pérez VasalloOlga María Pérez Vasallo

Nació en La Habana, Cuba el 7 de mayo de 1939.Hija de Emilio Pérez Gómez y de Celia Vasallo.

‘’Recuerdo la Cuba de mi niñez: estudie en una  escuela pública  donde matriculaban alumnos de todos los colores. Yo tenía vecinas que iban a la academia privada. Yo nací en la Habana en el área de las tiendas. Había en mi barrio una  clínica,  una fábrica de fideos, tres embotelladoras de refrescos, una fábrica de zapato y el Estadio de la Habana.’’ Ya adolescente: ‘’Nosotras nos divertíamos mucho y  nos cosíamos vestidos, bailábamos en los jardines de la Cervecería Tropical, eran orquestas que tocaban durante el día. Bailábamos los domingos o sábados por la noche el danzón y el cha cha cha. Bailé la orquesta de Beni Moré.’’

‘’Aprendí inglés después de la escuela. Así me hice profesora de inglés. En 1956 cerraron la universidad y la abrieron en 1959. En el tercer año de mis estudios sabía que financieramente no iba a poder seguir y me puse a trabajar en los veranos limpiando casas.  Después fui a trabajar en un departamento de servicio social en un Liceo. Lo que sé de oficina lo aprendí allí. Terminé en 1956 la Escuela Normal .Me convertí en una maestra repasadora por el Liceo. En 1959 me nombraron en las oficinas de Bienestar Social. Comencé entonces a estudiar la carrera de Pedagogía Así estuve hasta el 1963.En 1962  me case  en Cuba con Alfonso Soriano. Tuvimos una sola hija.’’

’En 1967 el gobierno cubano cerró Bienestar Social. Comencé a trabajar de maestra. Una vez que nació mi hija hice un curso especial en niños  con problemas de aprendizaje. En Cuba crearon los Comités de Defensa, fue cuando hicieron los vuelos de la libertad .Pudimos salir de Cuba en 1967. Nos establecimos en el Bronx.’’

‘’Después de hacer varios esfuerzos por conseguir trabajo me fui a Canadá  para tratar de que la Embajada Cubana que me ayudara a  volver a Cuba. Viví 18 años en Canadá, me puse a trabajar, después que no me permitieron la entrada de nuevo a Cuba. Regresé a Estados Unidos en 1989. Me presenté a una clínica de Planeación Familiar. Allí Trabajé como Guía y Consejera. Trabajé dos años ahí. Llegué a un Hospital en Madison Street, como consejera en 1992, ahí entro a la Unión.’’

‘’Yo vivía en el Bronx, iba en el tren. Me levantaba a las 6:30 am. Mi día empezaba a las 9:00 am, ya yo tenía una lista de pacientes a los que iba a ver. El 90% de mis pacientes eran mujeres embarazadas indocumentadas o no. Yo empecé en la unión el día que empecé a trabajar en el Hospital. Al año de estar trabajando me llamaron  y me preguntaron por qué no estaba pagando  la pensión. Me hicieron un cálculo para pagar mi retiro. Me retiré el 30 de noviembre del 2003. Soy miembro activo del Comité de la Herencia Latina.‘’


[Reprint from Retiree News & Views Novemeber/December 2018]